PREGÓN DE LAS FIESTAS DE BAHABÓN 2019

Haciendo un pequeño inciso entre las publicaciones del CERN os dejo aquí el pregón que tuve el honor de leer el día 14, en la inauguración de las fiestas de mi pueblo: BAHABÓN. Ha sido divertidísimo hacerlo. Gracias a todos los que aguantasteis estoicamente y aplaudisteis al final. ¡Felices fiestas!

¡Bahaboneros! ¡Bahaboneras! Señor Alcade… corporación municipal… gente maravillosa…

Me llamo Marina pero muchos de vosotros os estaréis preguntando: ¿y tú de quién eres, maja? Bueno pues soy la mayor de la Alicia, la chica de Trifino y de la señora Antonina. Esta es mi carta de presentación y los que conocistéis a mi madre, sabéis que es más que suficiente. Así que con la cabeza bien alta puedo decir que mi mayor logro en la vida es ser hija de mi madre que a su vez es hija de este pueblo. 

Cuando me pidieron dar este pregón, al principio me sorprendió y pensé: “les ha fallado el pregonero fijo”, pero luego me dije a mi misma que las oportunidades hay que aprovecharlas cuando llegan, y aquí estoy, más feliz que una perdiz.

Bahabón me ha dado muchas cosas. Gracias a que mis padres decidieron construirse una casa aquí he disfrutado de la mejor infancia que una niña de Valladolid puede tener. Así que este discurso está dedicado a todos los niños y adolescentes que estáis hoy aquí y que no estáis escuchando una sola palabra de lo que estoy diciendo porque estáis a otra cosa, en especial a mi sobrina Alicia. 

Las fiestas son cuatro días pero esos cuatro días de cada año se van a quedar grabados en vuestra memoria, volveréis a esos recuerdos cuando ya seáis mayores y los disfrutaréis en forma de anécdotas que os arrancaran una sonrisa cuando las cosas no vayan bien. Os calarán tanto que querréis que vuestros hijos disfruten tanto o más que vosotros.  A las pruebas me remito, la plaza está llena de niños.

Lo que está claro es que si eres de Bahabón has hecho ciertas cosas que voy a enumerar y que sólo un bahabonero de pura cepa reconocerá. 

Seguro que has visto una puesta de sol desde la parte de atrás de la iglesia, te has quedado una noche en vela para ver la lluvia de estrellas (que por cierto, tienen nombre: PERSEIDAS) y has pasado horas en el depósito del agua o en la báscula hablando con tus amigos y primos.

Has jugado al frontón y te has bañado en la piscina, has jugado al dos con dos por la noche (ORINALES) y has subido con la bici la cuesta de la iglesia. Has llamado a un timbre y has echado a correr y has visto una película al aire libre. 

Has ido de excursión a Minguela (a ver si hay agua) y allí te has comido un bocadillo, te has caido de un árbol o has subido a la Olma o ambos, has bebido de la fuente de la Teja y has rodado el huevo en la era de la Cres con una rosquilla de palo en la otra mano. Has paseado hasta el pinar del Cuco, has bailado jotas y has llevado la imagen de la virgen a cuestas. ¡Quién no ha tocado las campanas o ha sido monaguillo!

Seguro que has robado cortinas en fiestas y cambiado tiestos de lugar, has movido un remolque con el freno de mano echado, has pasado horas interminables preparando los disfraces o ensayando el play black (siempre para ganar) BACK STREET’S BACK-all right! Te has caido del escenario cuando los músicos ya no estaban y has ido a cortar rameras al valle para adecentar la peña (ya fuera en casa, en el pajar, en el lavadero, o en la casa de la maestra). Has dado tu primer beso…y tu segundo y tu tercero y tu cuarto…te has llevado tu primera decepción…y la segunda y la tercera y la cuarta…

Has cantado QUEEN dejándote la voz y has bailado en la fiesta de la espuma. Has bajado a la paella y a los hinchables, has montado en el tren,has llevado una chaquetilla para el frío del Poli  e incluso puede que hayas tirado alguna rueda de tractor cuesta abajo con fatal desenlace. Has estado en el chúndara de Peñafiel y en los Toros de Cuéllar.

Has cenado lechazo, orejas de ositos de gominola, te has quedado dormido en la peña, has comido chocolate con bizcochos a las 5 de la mañana y has llorado a moco tendido y reído a carcajadas en el mismo día. Incluso puede que hayas hecho guerra de cubos de agua al acabar el baile el último día de fiestas.

Cuando llueve aquí y te llega el olor a hierba húmeda, dices que huele a verano. Y si eres suficientemente viejo (reiros que yo antes era de la peña de las pequeñas) has estado en un apagón general, viste cómo ardía el transformador, te has bañado en el lago, has tomado algo en el bar de arriba y en el de abajo  y has comido magdalenas recién hechas a las seis y media de la mañana donde el panadero. 

Seguro que los mayores te han dado limonada y por eso ibas un poco alegre, has desayunado tortilla de patatas y ensaladilla al volver a casa para la resaca y tienes pantalones naranjas, morados, rojos, amarillos y verdes de cada peña a la que has pertenecido (CACHONDOS).

Así que chavales, la vida es corta, parece que tenéis todo el tiempo del mundo pero quizá no sea así, por eso: disfrutad de cada olor, baile, beso, risa o llanto porque cuando seáis mayores nadie os podrá quitar lo bailado.  Y mayores, no juzguéis a los chavales, dejadles corred desbocados, ahora les toca a ellos, es su turno. Para acabar solo quiero acordarme de los que por una u otra razón no están con nosotros hoy aquí. No pasa un día sin que os tengamos en mente. Os queremos. 

¡VIVA LA VIRGEN DE LA ASUNCIÓN!¡VIVA SAN ROQUE!¡VIVA EL SANTO CRISTO DEL AMPARO! Me he venido arriba…¡Y VIVA SAN ISIDRO LABRADOR! ¡FELICES FIESTAS BAHABÓN!

PD: Aquí está el video. Muak!